Alegría contagiosa
Un canal, otro y otro más, nada, no encontraba nada que me llamara la atención durante los últimos minutos de remoloneo antes de levantarme en un sábado en el que me permití hacer un repaso por la programación televisiva matutina.
Nada, hasta que un hombre sonriente, feliz, que disfrutaba con lo que estaba haciendo, ensimismado en su actuación, gozándola y transmitiendo sus emociones al público que lo escuchaba entregado, me hizo detenerme en la 2, la cadena “ideal para la siesta” como injustamente la han denominado aquellos que la practican…
En las imágenes se anunciaba el concierto celebrado este verano de la Orquesta Filarmónica de Viena*, desde los jardines del Palacio de Schönbrunn, y la actuación de un solista que me ha convertido, en tan solo unos segundos, en seguidora incondicional de su arte: Lang Lang.
Conocido como el artista de moda en la música clásica, ha colaborado con las principales orquestas sinfónicas y filarmónicas del mundo. Este joven pianista chino, embajador de buena voluntad para los niños por la Organización de Naciones Unidas, es un gran filántropo y fuente de inspiración para millones de jóvenes estudiantes de piano.
El comentarista lo definió, tras finalizar su actuación, como el músico de la “alegría contagiosa”. Un magnífico ejemplo para adultos, jóvenes y niños: “Haz lo que amas, ama lo que haces”… Si quieres, puedes!! :-))
*Podéis deleitaros con el concierto en: https://www.youtube.co/watch?v=aesA2QpEQKE